Ahora también hacen alianzas. Como el ARI, pero más berreta.
¿Se puede? Y... parece que sí, ya nada me sorprende.
Me entra por un oído y me sale por el otro, tengo cosas más importantes donde invertir mi tiempo.
Y si en este momento estoy escribiendo esto es porque no tengo ni sueño ni las fotocopias para estudiar Ciencia Política. En fin, me inflan como globo, el orgullo corre por mis venas, con tanta potencia que se me ponen rojas las cicatrices. Sí, esas que me hice por su culpa. ¿No tienen cosas más importantes para hacer que intentar arruinarme la vida? ¡Oh! Soy demasiado importante y me tienen que dedicar 100% de su tiempo sabiendo que eso no sirve para nada porque la balanza sigue de mi lado. Resentimiento puro, ¿no? Es la explicación más razonable que encuentro. Qué ganas de hacerles comer la hipocresía de una trompada.
Soy re odiable, y me encanta serlo. Soy soberbia, soy molesta, soy ácida para criticar, soy de esas personas que te escupe las cosas en la cara sin importar lo que puedas opinar, soy de esas que ganan y te refriegan la victoria en la cara. ¡Y no me creo superior a nadie! Es más, tengo el autoestima pisoteado por todo el sistema ferroviario. Sólo creo que el carácter te marca a fuego, y si ya no soy la misma que era cuando tenía 14 años y me pisoteaba no sólo el sistema ferroviario sino también todas las líneas del colectivo del conurbano bonaerense bancatela, todas las personas que me rodean aportaron su granito de arena para que ya no sea un angelito benévolo. Aburre ser bueno y dejarse pisotear, duelen las pisadas, y no da seguir sufriendo por dolores, también aburre.
"Meta palo y a la bolsa, y hacerse cargo, y no sentarse en la silla".
Todos me matan a piedrazos y esconden la mano cuando me voy a defender. ¡Pero por favor! Somos gente grande (o yo por lo menos lo soy), "parate de mano'" y aceptá las consecuencias de tus actos. ¿No querés? Listo, callate la boca y va a ser todo más fácil.
¡Hasta mañana! ¿Resentimientos de dos años? Pero por favor, ni a mí que soy "la peor" me dura tanto tiempo...
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